Una narrativa de color, destacando los tonos turquesa en contra posición con el blanco y el negro, invita a una sofisticada experiencia de la comida marina. Siendo Lemon Fish un restaurante que no pasa desapercibido. El diseño de iluminación es el resultado del trabajo con artesanos locales, quienes dieron vida a las icónicas luminarias en forma mantarraya.